Ernesto Valverde se ha ganado el respeto de la afición culé con su excelente aterrizaje. Pero ahora necesitará mucha personalidad y mano izquierda para manejar la situación. De entrada, ante un rival de enjundia, parece muy complicado alinear juntos a Dembélé, Coutinho, Iniesta, Messi y Luis Suárez sin descompensar el equipo. No digamos ya si llegara Griezmann en verano.
Algo cambió en el mundo del fútbol el 3 de agosto con el fichaje de Neymar por el PSG. Los clubes españoles debían decidir si se sumaban a la locura de precios desatada y el Barça ha elegido jugar. Será muy complicado disociar la necesidad que tenía el club por el francés y el brasileño del precio pagado por ellos. Y a un jugador de 150 millones es muy difícil dejarle de suplente.
Además, calcando lo que le sucedió al Madrid con Bale–Isco entre marzo y mayo, una de las claves de este imparable Barça parece el equilibrio que ha aportado Paulinho como cuarto centrocampista. Valverde ganará ahora mucho poderío ofensivo y tendrá infinidad de alternativas, pero el equipo correrá el riesgo de romperse por el medio. Es probable que Busquets duerma menos tranquilo estos días.
Se habla de Coutinho como reemplazo de Iniesta. Últimamente ha estado aprendiendo el oficio de interior en el Liverpool, pero sigue teniendo lagunas defensivas y parece más cómodo unos metros más arriba. Siempre con una cierta tendencia a arrancar desde la izquierda, pero finalizando las jugadas por dentro. Es válido tanto para el juego de posesión como para las transiciones. Y colma una carencia del Barça: el disparo de media distancia. En los dos últimos años, ha sido el máximo goleador de la Premier desde fuera del área, tanto en jugada como de falta.
Con Jürgen Klopp se ha convertido en un futbolista más constante en su rendimiento, de muchas más apariciones en los 90 minutos. Llega al Barça en plena madurez futbolística. Con 25 años y asentado como titular en Brasil, buscará su hueco cerca de Messi. Y, aunque esta temporada no podrá participar en Champions, hará mejor a la Liga española. No lo duden.